miércoles, 25 de febrero de 2015

Candidatos

Este fin de semana se presentaban en Lugo los candidatos del Partido Popular a todos los ayuntamientos de la provincia en las próximas elecciones municipales.

Detrás de los discursos y la sencilla puesta en escena están las historias de 67 personas que aspiran a ser alcaldes de sus pueblos o a revalidar la confianza que sus vecinos les otorgaron ya en anteriores comicios. Junto a las suyas, pronto se sumarán las de las personas que completarán las candidaturas y que después formarán parte de los equipos que aspiran a gestionar los recursos, generalmente escasos, de sus presupuestos municipales.

Son mujeres y hombres que viven o vivirán la más alta misión que los ciudadanos pueden encargarles a través del voto de la confianza: la de ser alcaldesas o alcaldes de sus lugares de residencia. 

Siempre he pensado que el paso por la vida municipal, en el gobierno o en la oposición, debería ser requisito imprescindible para poder optar a todo puesto político de cualquier ámbito. No es un capricho, y me explicaré.

Los ciudadanos cada vez otorgan más importancia al contacto y acceso a las personas que los representamos. Los concejales y alcaldes tienen la oportunidad, y también la facilidad, de poder comprobar de primera mano cada una de las actuaciones que programan desde sus despachos, tienen sus puestos de trabajo a pie de calle, en contacto permanente con los vecinos que trasladan sus quejas, y de vez en cuando felicitaciones y palabras de ánimo.

Sus horarios no son de 8 a 15h, sino de 0 a 24h. Sus móviles suenan en cualquier momento y su vida privada queda reducida y acotada por las numerosas demandas del vecindario. No tienen coche oficial, ni escoltas. La mayoría se las apañan para organizar el papeleo y los trámites administrativos con la ayuda de personal todoterreno, personas que valen para un roto igual que para un descosido. Pero quizás lo más importante resida en su vocación de servicio. Sus prioridades están muy claras, sus vecinos, sus problemas y necesidades. 

Acuden a las diputaciones, consejerías y en ocasiones a los ministerios en busca de soluciones y ayudas económicas para financiar los servicios que sus presupuestos nunca podrán cubrir, y por lo general regresan con las manos vacías o con promesas que sólo en ocasiones se materializarán.

Por estas y otras razones es por las que considero más que recomendable que todo alto cargo público viva previamente una etapa de experiencia municipal. Porque además de su preparación y méritos propios, tendrán en su haber la sensibilidad política que sólo se adquiere en el servicio público de aldeas y pueblos, de pequeñas y grandes ciudades. En los ayuntamientos.

Conozco a muchos de los 67 desde hace tiempo y a otros, los más jóvenes, los sigo desde sus comienzos en política. Tienen por delante una difícil tarea en momentos muy complicados para ejercer la política. Por eso y desde estas líneas reivindico la importancia de su papel, de candidatos a concejales y muchos a ser alcaldes. Suerte a todos. La necesitarán.


Candidatos

Este fin de semana presentábanse en Lugo os candidatos do Partido Popular a todos os concellos da provincia nas próximas eleccións municipais.

Detrás dos discursos e a sinxela posta en escena están as historias de 67 persoas que aspiran a ser alcaldes dos seus pobos ou a revalidar a confianza que os seus veciños lles outorgaron xa en anteriores comicios. Xunto ás súas, pronto se sumarán as das persoas que completarán as candidaturas e que despois formarán parte dos equipos que aspiran a xestionar os recursos, xeralmente escasos, dos seus presupostos municipais.

Son mulleres e homes que viven ou vivirán a máis alta misión que os cidadáns poden encargarlles a través do voto da confianza: a de ser alcaldesas ou alcaldes dos seus lugares de residencia.

Sempre pensei que o paso pola vida municipal, no goberno ou na oposición, debería ser requisito imprescindible para poder optar a todo posto político de calquera ámbito. Non é un capricho, e explicareime.

Os cidadáns cada vez outorgan máis importancia ao contacto e acceso ás persoas que os representamos. Os concelleiros e alcaldes teñen a oportunidade, e tamén a facilidade, de poder comprobar de primeira man cada unha das actuacións que programan dende os seus despachos, teñen os seus postos de traballo a pé de rúa, en contacto permanente cos veciños que trasladan as súas queixas, e de cando en vez felicitacións e palabras de ánimo.

Os seus horarios non son de 8 a 15 h, senón de 0 a 24h. Os seus móbiles soan en calquera momento e a súa vida privada queda reducida e acoutada polas numerosas demandas da veciñanza. Non teñen coche oficial, nin escoltas. A maioría apáñanllelas para organizar o papelame e os trámites administrativos coa axuda de persoal todoterreo, persoas que valen para un roto igual que para un descosido. Pero quizais o máis importante resida na súa vocación de servizo. As súas prioridades están moi claras, os seus veciños, os seus problemas e necesidades.

Acoden ás deputacións, consellarías e en ocasións aos ministerios en busca de solucións e axudas económicas para financiar os servizos que os seus presupostos nunca poderán cubrir, e polo xeral regresan coas mans baleiras ou con promesas que só en ocasións se materializarán.

Por estas e outras razóns é polas que considero máis que recomendable que todo alto cargo público viva previamente unha etapa de experiencia municipal. Porque ademais da súa preparación e méritos propios, terán no seu haber a sensibilidade política que só se adquire no servizo público de aldeas e pobos, de pequenas e grandes cidades. Nos concellos.

Coñezo moitos dos 67 dende hai tempo e a outros, os máis novos, sígoos dende os seus comezos en política. Teñen por diante unha difícil tarefa en momentos moi complicados para exercer a política. Por iso e dende estas liñas reivindico a importancia do seu papel, de candidatos a concelleiros e moitos a ser alcaldes. Sorte a todos. A van necesitar.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

coincido Joaquín, ser candidato es tener clara una vocación, hoy denostada y poco valorada, hay que reivindicar el valor de dar un paso al frente para querer cambiar cosas en beneficio de nuestros ciudadanos

Anónimo dijo...

Bo artigo Joaquín
un saúdo dende a montaña

Anónimo dijo...

hoy la política está menospreciada, a los pies de los caballos ( y no diré que a veces de forma merecida) pero también es cierto que por 3 corruptos no se puede generalizar a todo el colectivo d personas que quieren hacer una sociedad mejor para todos.
Los partidos deberíais implatar mecanismos para que no se os cuelen vividores o aprovechados , que haberlos los hay

Anónimo dijo...

Magnifico artículo de nuestro Diputado sin duda se conseguirán grandes resultados en las elecciones de mayo

Jose dijo...

Me gusta mucho tu artículo, Joaquín. Es de justicia dedicarle estas palabras a todos los candidatos a las municipales. La inmensa mayoría prestan un servicio totalmente altruista, cosa de la que mucha gente no es consciente, incluso hay quien cree que hay intereses personales ocultos por parte de quien se decide a participar en la política municipal.

Lo que sí me gustaría dejar claro es que, sin perjuicio de que me parezca acertada la selección que la dirección del partido ha hecho de los candidatos a alcalde, lo que me parece lamentable (y cada vez más chirriante a medida que pasa el tiempo) es que todavía en 2015 no sean los militantes los que puedan elegir a los candidatos entre aquellos que se quieran postular para ello. Probablemente no habría mucha diferencia respecto de la selección ya hecha (en mi caso concreto, mi elección seguiría siendo Jaime Castiñeira). Entonces, ¿no quedaría mucho mejor?¿No tendría una mayor legimitación moral dicha selección? Nuestro sistema democrático tiene mucho que mejorar y el punto de partida tendría que estar en el seno de los partidos políticos, porque la sensación que tienen los militantes como yo es que solo contamos para ir a los mítines a aplaudir y para pedir el voto en las campañas electorales. Los que no lo quieran ver, allá ellos, pero yo deseo lo mejor para el partido al que estoy afiliado y, en definitiva, para Lugo, Galicia y España.

Un afectuoso saludo.